Representado por:  
Galería BAT– Alberto Cornejo (Madrid)  
Galería CREARTE-JLN (Valencia)

ESTUDIOS – EXPERIENCIA LABORAL – PUBLICACIONES

  • Doctor en Bellas Artes en el programa “Ciencia y Restauración del patrimonio histórico-artístico en el 2017
  • Licenciado por la U.P.V. en la Facultad de Bellas Artes en 1995 por las Especialidades de Pintura y  Conservación y Restauración de Bienes  Culturales            
  • Desde el 2015 hasta la actualidad, Director gerente de la galería de arte CREARTE-JLN 
  • Del  2002 al 2014, Director del taller de restauración de la Fundación “La Luz de las Imágenes”.
  • Libro: “5 Restauraciones de arte Contemporáneo”. Consellería de Cultura, Educación y Ciencia. Depósito Legal: V-2750-1999

EXPOSICIONES Y CONCURSOS

  • 3º Premio en el XLVIII Concurso Internacional Homenaje a Rafael Zabaleta 2018
  • Seleccionado Concurso Internacional de Fuente Alamo 2018
  • Seleccionado Lopez Villaseños de artes plásticas 2016
  • Seleccionado Arte s plásticas dÄlgemesí 2016
  • Feria de arte ESPACIO 120 Barcelona, Junio 2015
  • Exposición colectiva en Nueva York en la JMC Gallery , Junio 2015
  • Exposición colectiva en Dallas en TVAA Gallery , Abril 2015
  • Exposición colectiva en Barcelona en Untitledbcn, Abril 2015
  • Exposición colectiva en Madrid en la Galeria EMMA. Abril 2015
  • Exposición colectiva en la casa de Cultura de Alcoy., Febrero 2015
  • Exposición Individual Galería Puchol, Valencia, Marzo 2014
  • Exposición Individual Galería Estil, Valencia, Mayo 2008
  • Exposición Individual Galería Estil, Valencia, Mayo 2007
  • Exposición Individual Galería Estil, Valencia, Junio 2006
  • Exposición Individual Galería Estil, Valencia, Mayo 2005
  • Seleccionado López Villaseñor de artes plásticas 2005
  • Obra seleccionada concurso BMW ,  Noviembre  2004
  • Exposición Individual Galería Estil, Valencia ,Junio 2004
  • Exposición Individual Galería Sánchez y Juan, Elche , Noviembre 2003
  • Exposición Individual Galería Estil, Valencia ,Junio 2003
  • Interarte 2002, del 6-10 de Noviembre 2002
  • Exposición individual Galería Estil, Valencia ,Junio 2002
  • Galería Estil- Colectiva, junio 2001
  • Interarte 2001, del 17 al 21 de Octubre
  • Sala de Exposiciones Central Hispano20, Noviembre del 1995
  • Circulo de Bellas Artes- Colectiva, junio del 94
  • Circulo de Bellas Artes- Colectiva “ Dialectos Plásticos” sep 94

DESCRIPCIÓN

Por Dr. Salvador Aldana  Fernández
Académico de Bellas Artes de San Carlos de Valencia.

NOTAS DE UN INTEMPORAL CÁNTICO

Dejar que el mundo que está naciendo se nos muestre en cada instante de su creación, es lo que José Luís Navarro aporta al Arte desde su actual compromiso pictórico.

Ya aparezcan en sus lienzos amarillos fulgurantes, cálidos sienas o agresivos negros violáceos, todos permanecen misteriosamente inmaculados, ofreciéndonos ejemplos de lo que fueron en el Tiempo, de lo que hoy son y  mañana serán.

¿Qué puede existir cuando terminamos de recorrer aquel sendero en el que los árboles –plicas en el proceso genesiaco de una partitura naciente- nos observan desde su desnuda verticalidad? ¿Quizá un abismo de fronteras cósmicas? Atravesarlas, ¡qué ardua tarea para el crítico!

¿Qué hay detrás de ese cielo de un nuevo amanecer en el que las hojas de los árboles se han quedado quietas y mudas agazapadas tras el misterio? ¿Quizá está naciendo del azul una nueva forma de creación hecha sonido? ¿Oímos y sentimos simultáneamente?

Notas de un intemporal cántico son, una a una y todas en su conjunto, las pinceladas que Navarro deja deslizarse sobre el teclado inerte de la tela sobre el que se harán vivas.

A veces, en un lienzo, manchas blancas y sin tiempo se abren en todas direcciones girando vertiginosamente en medio de un silencio total. Un inmaterial fluir de sienas, potenciadas por pinceladas de color extraídas de la materia oscura del Universo, nos hace reflexionar sobre la esencia de lo minúsculo –quarks de arriba o de abajo del núcleo del átomo- y de la recoleta visión de lo que ha nacido y que no podemos percibir en su totalidad, a pesar de utilizar las más sutiles experiencias de las prácticas de la filosofía Zen que ponemos en práctica para comprender los tiempos del Cosmos, a donde nos conduce el artista.

Cuando José Luís Navarro  nos invita a alcanzar los límites del conocimiento a lo largo de un sendero, esta vez nacido de cadencias otoñales, llegamos a reconocernos en lo más profundo de nuestro ser y nos inundamos de su propio gozo. Vamos acompañados de pinceladas verdes apenas nacidas, de sienas desvaídos junto a unas cadencias de negros oliváceos, mientras que leves manchas anaranjadas nos incitan desde su mismidad.

Como en un friso que avanza sin principio ni fin, delgados trazos de árboles, hechos de sosegados verdes, excitan cada átomo de nuestro ser, externo e interno, reflejándose sobre nosotros mismos y propiciando la creación, en la esfera de los sentidos, de un espejo perpetuo hecho de mundos sensibles que nos atraen haciéndonos suyos. ¡Perpetua ordenación del Caos!

Quisiera que mis palabras fueran una incitación para poder alcanzar tal estado de conciencia que nos permitiera aprehender la esencia y la significación cósmica de su arte y de todos sus valores de universalidad. Para lograrlo nuestro pensamiento debe avanzar apoyándose en pinceladas ahítas de silencio –notas maculadas de amarillos cósmicos- que consiguen –por medio de lejanos e irreales azules-  hacer más profundo y auroral el vacío.

En toda la obra de José Luís Navarro, que ha tenido el privilegio de conocer distintas individualidades en sus lienzos para hacer que formen parte de su universo pictórico teniendo cada uno de ellos su propia y distinta personalidad, hay un gozo nuevo por descubrir horizontes que creíamos extintos en el arte contemporáneo; como también la alegría de un creador que puede asomarse a abismos donde nacen las nuevas formas.

Al concentrar nuestra mirada crítica en cada una de sus obras nos sentimos inmersos en tantos y tantos detalles del mundo que presenta ante nuestros ojos que pasamos desde una fase de atenta observación –búsqueda de lo recóndito de su arte-  hasta la plena identificación con su mensaje. ¡Qué difícil resulta llegar a lo más profundo de la creación artística, siempre tan llena de misterio!

Resulta evidente que el mundo pictórico que Navarro nos ofrece,  apoyándose en la esencia de su mensaje y en los leves trazos de la materia que da vida a sus ideas, nos reduce el transcurrir monótono del tiempo a fragmentos tan mínimos y tan intemporales que parecen brotar de la sentencia que hace siglos dejara a sus discípulos un famoso pensador Zen:

Cuando paso sobre el puente, no es el agua la que corre, sino el puente.

Más aún, al contemplar su pintura sentimos que estamos percibiendo en ella lo que nos recordaba aquel “Haiku” del poeta japonés Insa:

Qué hermoso
Observar la Vía Láctea
A través de un agujero de la ventana.

La obra de José Luís Navarro –Vía Láctea de sensaciones- nos ofrece todo eso y mucho más porque reduce la sublime a lo sencillo, lo gigante a lo mínimo, la razón íntima de su arte a lo universal: o lo que es lo mismo hace nuestra su íntima realidad y consigue que nos sintamos inmersos en ella.